Con tu sonrisa de amada dormida
la escribo.
Mi valiente amada inmóvil.
Escribo la que será mi obra
en tu espalda
el que será tu hijo
y conjuro
el hechizo de Xilene
que te secó de niños
con una sola mirada.
Me alzo contra ese mal
con este hijo
que trazo lento
sobre tu papel de piel.